Aitor Sánchez, nutricionista albaceteño: “Que lo sano sea fácil para una alimentación saludable en verano”

Con la llegada del verano nuestras costumbres saludables pueden verse alteradas. Las vacaciones y el calor provocan que la rutina de alimentación cambie al cometer excesos y desequilibrios.

Esta época estival “lo que vemos los nutricionistas es que hay como dos vertientes. Por un lado, personas que siguen, más o menos, una dieta estructurada pero que la alteran para mal en el verano. Por otro lado, nos encontramos con gente que lo hace para bien, a veces la propia rutina es la que no le permite tener buenos hábitos y con el verano cambia al poder dedicarle más tiempo a la compra, a la comida o a el deporte. Estos son los dos escenarios más típicos que vemos”, explica el nutricionista albaceteño, Aitor Sánchez.

La diferencia que se aprecia en el verano en cuanto a la alimentación es el gran cambio en la rutina y el cambio en contextos no controlados. Estos últimos se deben a las vacaciones, el cambiar de entorno y de hábitos provocan que no se coma de la forma más saludable.

“Seguir una alimentación saludable en verano es exactamente igual que en cualquier época del año. Lo que hay que tener en cuenta es que aparecen ciertas tentaciones como helados, refrescos o la cerveza antes de comer y de cenar”, dice el nutricionista. A lo que añade un buen consejo como “no facilitarnos y encontrarnos esos alimentos en casa o en la compra porque ya aparecerán todos esos tipos de consumos fuera del hogar. Es decir, no comprar este tipo de alimentos porque surgirá la ocasión de consumirlos fuera de casa”.

La idea sería hacer accesible otros alimentos en casa como la fruta ya cortada en el frigorífico o productos como las cerezas o albaricoques que son de bocado. “Que lo sano sea fácil. Asumir que los caprichos se van a tomar fuera porque si encima nos llevamos los caprichos a casa, estamos duplicando, como mínimo, esas injertas”, argumenta Aitor. Buscar un equilibrio en estos meses puede resultar algo complicado, pero si se buscan alternativas saludables se pueden crear buenos hábitos en esta época. La idea es mantener un entorno saludable en los hogares.

Los excesos en vacaciones hay que controlarlos

El albaceteño pone de ejemplo que, al igual que pasa en Navidad puede pasar en los días de vacaciones. La Navidad son cinco celebraciones contadas, lo que “no podemos hacer es que las vacaciones de verano las convirtamos en esas navidades que pasan de ser unos días clave a excederse dos meses por su disponibilidad. En el caso del verano que nos vamos de escapada unos días, no es el problema cambiar de hábitos. El problema está cambiar el modelo de todo el verano”, señala.

En cuanto a las vacaciones de larga duración como puede ser alojarse en un apartamento o una parcela, es importante controlar los hábitos. Hay que tener en cuenta a lo que “me voy a enfrentar. Si por una parte es una única salida de pocos días o va a ser un periodo medio largo. Acorde a ello hay que controlar más o menos para que no se convierta en la excusa del verano ya que toda la estación no son vacaciones”, añade el nutricionista.

Los productos de temporada, ¿son unos aliados?

Los productos de temporada se consideran unos aliados en cualquier época de año porque “están más buenos, son más baratos y son más accesibles y sostenibles por todos los motivos. Es cierto que los precios están disparados, pero siempre será mejor consumir fruta o hortalizas de temporada”, dice Aitor.

Al recolectar verduras, hortalizas y frutas en su punto óptimo de maduración hace que sean más apetecibles. El verano ofrece una amplia variedad de productos saludables que son el perfecto complemento para llevar una dieta saludable durante estos días. “Precisamente muchas personas consumen más fruta en verano porque son más llamativas. La primavera y el verano son las épocas favoritas para consumir este tipo de alimentos”, añade.

Aitor Sánchez propone buscar ideas para incorporar estos productos de manera más divergente como un batido de frutas congeladas, Smoothie, gazpachos, salmorejos o sopas frías. Buenas alternativas para incorporar a nuestra dieta alimentos de temporada y contribuir a una dieta saludable. “No esperemos al término del verano para retomar los hábitos saludables ya que son muchos días”, finaliza.