El Colegio de Fisioterapeutas de Castilla-La Mancha ha aprovechado la inminente campaña de verano para advertir del riesgo de malas zambullidas en lugares públicos para el baño, recordando que suponen hasta el 6% del total de lesiones medulares de las cerca de mil que se producen en España cada año.
Las lesiones se producen en varones jóvenes primordialmente y presenta terribles repercusiones para la salud, además de un alto coste social y familiar debido a la gravedad de los daños neurológicos que de él se pueden derivar, recuerda el colegio en nota de prensa.
En la piscina, los saltos desde el borde o trampolines pueden llevar a graves lesiones si no se conoce la técnica adecuada para saltar o la profundidad de la piscina. La persona que se sumerge puede chocar contra la masa de agua o el suelo y provocarle una grave lesión medular.
"Las consecuencias de una mala zambullida pueden ir desde una fractura más o menos leve hasta una lesión medular o un ahogamiento si se pierde la conciencia. Es importante que al realizar los saltos, los brazos vayan por delante para proteger el cuello y la cabeza en caso de impacto", afirman desde el colegio.
En sitios como la playa, los acantilados, zonas portuarias, ríos o pantanos, en los que el agua puede ser menos clara, el elemento más importante a tener en cuenta es la profundidad.
"Cada verano en nuestro país se producen casos de lesiones medulares por irresponsabilidades de los bañistas y en la mayoría de las ocasiones podrían evitarse tomando las medidas oportunas y siendo conscientes del peligro", afirman desde el Colegio de Fisioterapeutas de Castilla-La Mancha.