El Gobierno de Castilla-La Mancha, a través de la Dirección General de Salud Pública, ha confirmado 3.758 nuevos casos por infección de coronavirus durante la semana del 4 al 10 de julio, en personas mayores de 60 años.
Por provincias, Toledo ha registrado 1.187 casos, Ciudad Real 925 casos, Albacete 821, Cuenca 489 y Guadalajara 336.
Actualmente el número de hospitalizados en cama convencional por COVID-19 es 563. Por provincias, Toledo tiene 216 de estos pacientes (142 en el Hospital de Toledo, 71 en el Hospital de Talavera de la Reina y 3 en el Hospital Nacional de Parapléjicos), Ciudad Real 131 (39 en el Hospital General Universitario de Ciudad Real, 38 en el Hospital Mancha Centro, 21 en el Hospital de Tomelloso, 14 en el Hospital de Valdepeñas, 12 en el Hospital de Puertollano y 7 en el Hospital de Manzanares), Albacete 98 (67 en el Hospital de Albacete, 16 en el Hospital de Villarrobledo, 8 en el Hospital de Almansa y 7 en el Hospital de Hellín), Guadalajara 92 (todos ellos ingresados en el Hospital de Guadalajara) y Cuenca 26 (todos ellos en el Hospital de Cuenca).
Los pacientes ingresados en las Unidades de Cuidados Intensivos que necesitan respirador son 24. Por provincias, Ciudad Real tiene 8 de estos pacientes, Toledo 8, Guadalajara 4, Albacete 3 y Cuenca 1.
A lo largo de la semana ingresaron en Unidades de Cuidados Intensivos 23 pacientes y 491 en cama convencional.
Asimismo, durante la semana 27 se registraron 46 fallecidos por COVID-19, 17 en la provincia de Toledo, 11 en Guadalajara, 7 en Albacete, 6 en Ciudad Real y 5 en Cuenca.
Centros Sociosanitarios
126 centros sociosanitarios de Castilla-La Mancha tienen casos confirmados por coronavirus entre los residentes.
Concretamente 50 en la provincia de Toledo, 28 en la provincia de Ciudad Real, 19 en Albacete, 17 en Guadalajara y 12 en Cuenca.
Los casos confirmados entre los residentes son 1.057.
Sanidad estudia poner la 4º dosis a mayores de 60 años y aconseja cumplir las pautas recomendadas
La Comisión de Salud Pública ha estudiado la necesidad de poner una segunda dosis de recuerdo de vacuna contra la COVID-19, tal y como propone la Ponencia de Vacunas, a personas vulnerables, mayores de 60 años y personal sanitario y sociosanitario.
No obstante, y a la espera de definir el momento para hacerlo en función de la evidencia científica y de la situación epidemiológica, en la reunión, en la que según han confirmado a Europa Press ha habido consenso, se ha destacado la importancia de recordar a la población que inicie o complete, según cada caso, la pauta de vacunación recomendada para su edad. Ahora falta por saber el cuándo y el cómo administrar la cuarta dosis a los mayores de 60 años.
El Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) y la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés) han recomendado comenzar ya con la administración de la segunda dosis de refuerzo de la vacuna contra la COVID-19 en mayores de 60 años y personas vulnerables de cualquier edad, así como continuar con una quinta dosis en otoño.
En abril, la EMA y el ECDC recomendaron que las personas mayores de 80 años recibieran una segunda dosis de refuerzo de las vacunas de ARNm. Ambas agencias también señalaron en ese momento que si había un "resurgimiento significativo" de las infecciones, las personas de entre 60 y 79 años y las personas vulnerables de cualquier edad también deberían recibir una cuarta dosis.
"Dado que actualmente se está produciendo una nueva oleada en Europa, es importante que las autoridades de salud pública consideren ahora a estos grupos para una segunda dosis de refuerzo. Esta nueva recomendación se produce en un contexto de aumento de las tasas de notificación de COVID-19 y de las tasas de ingresos y ocupación de hospitales y unidades de cuidados intensivos (UCI) en varios países", explican los dos organismos a través de un comunicado.
Asimismo, la Comisión de Salud Pública ha avanzado en el Sistema de Información de Vacunaciones e Inmunizaciones (SIVAIN) que registrará de forma centralizada todas las vacunaciones e inmunizaciones administradas en el marco del Sistema Nacional de Salud. El plazo aproximado para el desarrollo es de 2 años.