
Gente por la calle con mascarilla. Foto: Europa Press
España dice hoy adiós a las mascarillas 700 días después de su implantación obligatoria debido a la pandemia de COVID-19 pero en comunidades autónomas como Castilla-La Mancha el decreto aprobado por el Gobierno central está generando dudas en los primeros momentos.
Así lo ha reconocido hoy la consejera portavoz del Gobierno castellanomanchego, Blanca Fernández, quien a preguntas de los periodistas no ha sabido aclarar algunas cuestiones sobre el uso de la mascarilla tanto en los centros de trabajo -tanto públicos como de la Administración- como en el ámbito educativo.
“No nos quedan claros algunos matices, pero es cuestión de horas que se resuelvan”, decía. Recordaba que ayer “se dio capacidad a los servicios de seguridad y salud de las empresas y de la Administración, previa evaluación, para poner medidas de control. Cada centro de trabajo tiene que ser evaluado y la Junta tiene muchos”, comentaba.
Así que, añadía, habrá que evaluar “centro a centro” pero “la norma general es que no hay obligación de mascarillas, excepto que un determinado espacio de trabajo no tenga ventilación por ejemplo” y la mascarilla se deba seguir llevando.
La “incertidumbre” en los centros educativos
En cuanto a los centros educativos, Blanca Fernández comentaba que “está claro” que ha quedado eliminada la obligatoriedad de las mascarillas, aunque se recomiende para el profesorado vulnerable, “salvo que los centros decidan otra cosa”.
Las dudas también las expresaba hoy el sindicato UGT en Castilla-La Mancha quien avisa de la avisa de la “incertidumbre” en los centros educativos ante la retirada de las mascarillas obligatorias.
Manuel Amigo, responsable de Enseñanza del sindicato en la región así lo ha explicado. “Creemos que se podía haber descompasado la fecha de retirada general de la obligatoriedad de mascarillas en interiores, de la obligatoriedad del uso de la misma en centros educativos, retrasando la medida unos días en los centros educativos. De esta manera, retrasando la retirada de la obligatoriedad, por ejemplo, dos semanas, la comunidad educativa ya estaría más habituada a la nueva situación y ya se hubiera experimentado el funcionamiento de la medida a nivel general”.
Por otro lado, afirma “el uso de la mascarilla ha sido uno de las medidas de prevención principales frente al contagio por coronavirus en los centros educativos y va a costar un poquito habituarnos al no uso obligatorio de las mismas en los centros educativos, después de tantos meses siendo elemento indispensable”.
Amigo ha resaltado la importancia de las medidas de prevención que en estos momentos se hacen todavía más necesarias “ahora se hacen más importantes si cabe el correcto uso de las otras medidas de prevención frente al contagio, como son, ventilación natural cruzada en las aulas, y mantenimiento de las distancias de seguridad. Esperamos la readaptación de los protocolos por parte de Sanidad para los centros educativos”.
Esta es una cuestión que le han planteado a la consejera portavoz durante la rueda de prensa ofrecida hoy en el Palacio de Fuensalida. ¿Habrá normativa regional complementaria al decreto nacional? Una pregunta a la que no se ha dado respuesta precisa de momento. La Consejería de Sanidad tampoco aclaró ayer este extremo a preguntas de elDiarioclm.es
Desde UGT apuntan que “la comunidad educativa está muy dividida que hay profesores que manifiestan que seguirán utilizando la mascarilla y también hay familias y alumnado que se manifiesta indeciso ante la nueva situación” y por eso explican que “se mostrarán vigilantes para que se cumplan las condiciones de seguridad y salud laboral en los centros educativos en esta nueva etapa de la pandemia”.