El Teatro Circo ha sido el escenario para la presentación de otra joya patrimonial de Albacete: El Acequión. Hace algo menos de 40 años, este yacimiento, posiblemente el más importante del municipio, era un total desconocido. Tras las primeras excavaciones, a mediados de los ochenta, y su declaración como Bien de Interés Cultural en 1991, cayó en un terrible ostracismo roto solo por investigaciones parciales. El Ayuntamiento de Albacete, a través de la Concejalía de Participación Ciudadana, decidió hace dos años darle una oportunidad a El Acequión. Ahora, por fin, ya está en el mapa del patrimonio histórico de la provincia. Y es más, ya se trabaja para que tenga un espacio museístico.
El Acequión se encuentra a 14 kilómetros al oeste de la ciudad. Es un yacimiento constituido por una pequeña isla artificial, levantada en el espacio que ocupaba una antigua laguna endorreica. Fue poblado en la Edad del Bronce y es un exponente de lo que se denomina como “La Cultura de las Motillas”, es decir, establecimientos humanos ubicados en pequeñas elevaciones en medio de extensas llanuras manchegas. En la zona de Ciudad Real son numerosas este tipo de construcciones muy relacionadas con el control de las fuentes de agua y el empeño por conservar el aprovisionamiento en épocas de mucha sequía. El Acequión sería la motilla más oriental de todo el conjunto y por sus características, es un yacimiento único.
Como ha explicado Luis Benítez de Lugo, profesor de Prehistoria de la Universidad Complutense de Madrid y director científico del proyecto promovido por el Ayuntamiento, “en el yacimiento se realizó una investigación modélica que fue incluso referente internacional y es también un referente de arquitectura en la historia de Castilla-La Mancha”. El profesional ha querido destacar ante el auditorio la importancia de El Acequión y les ha animado a que, entre todos, “pongamos freno a un proceso creciente de destrucción”.
Este lugar estuvo habitado desde la Edad del Bronce hasta la época romana y durante 400 años, sus pobladores sufrieron una grave sequía que condicionó la supervivencia para siempre.
La cultura material recuperada a mediados de la década de los ochenta y que se conserva en el Museo de Albacete y en el Museo Arqueológico Nacional está ayudando a desvelar la utilidad de un lugar como éste. Para ayudar a que la investigación avance, el Ayuntamiento de Albacete consiguió hace un mes la cesión de los terrenos del yacimiento de “El Acequión” y así seguir impulsando las actuaciones de mantenimiento y consolidación. Durante 20 años se podrá seguir trabajando en este lugar arqueológico de más de 14.338 metros cuadrados aunque el Ayuntamiento tiene la intención de adquirir los terrenos.
Esta es una de las noticias que ha avanzado Manuel Martínez, concejal de Participación Ciudadana, quien durante el acto en el Teatro Circo ha presentado la página web. Martínez ha comentado que El Acequión “engancha por la energía que desprende, fruto de lo que se ha vivido allí”. El Acequión tiene un gran futuro y “tenemos la obligación de devolverle a la ciudadanía el conocimiento de la motilla”, ha dicho el impulsor de este proyecto arqueológico.
Por último, el alcalde de la ciudad, Emilio Sáez, ha mostrado el apoyo del consistorio y ha insistido en que “hoy seguimos haciendo historia, seguimos con el empeño de dar luz a nuestra historia”. En el evento cultural también han participado el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Francisco Tierraseca y el el presidente de la Diputación de Albacete, Santiago Cabañero.
De momento, El Acequión vuelve a sonar entre los albaceteños. Un espacio que antaño era sitio de recreo y que después se olvidó. Un espacio natural para el paseo y que ya podemos disfrutar de manera online, con contenidos audiovisuales, de este importante yacimiento que esconde los orígenes de Albacete, la ciudad que decían que no tenía historia.