El vicepresidente de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, ha avanzado que el jueves se celebrará una sesión del Consejo de Gobierno extraordinario para analizar “si podemos flexibilizar las medidas que tomamos la semana pasada o tenemos que prorrogarlas otros diez días”.
Fue el pasado 18 de enero cuando el Gobierno castellanomanchego decidió endurecer las medidas ante el avance de la pandemia cerrando todos sus municipios, estableciendo un toque de queda entre las 22 y las 7 horas además de cerrar toda la hostelería, entre otras cuestiones, durante un plazo de diez días.
A lo largo de la semana, por otro lado, el Gobierno ha ido matizando algunas de las medidas, como las relacionadas con velatorios, sepelios, bodas y comuniones. De manera que solo se permiten seis personas en velatorios y comitivas fúnebres y tanto en sepelios como bodas y bautizos el aforo en el interior de los lugares de culto es del 40% y en el exterior no se podrá exceder de las cien personas.
También se ha modificado la situación para los cazadores que ahora ven limitada su actividad al ámbito del municipio.