Los representantes de la Asociación de Clínicas Acreditadas para la Interrupción Voluntaria del Embarazo han transmitido este lunes al Subdelegado del Gobierno, Aquilino Iniesta López, que la pasividad de los responsables de la Seguridad en la provincia está alentando a los grupos "antielección", quienes desde hace más de un año vienen presionando a mujeres y profesionales en las puertas de los centros de IVE en toda la comunidad en general, y de manera particular en la provincia de Albacete a las puertas de la Clínica Iris.
Estas acciones que han traspasado en diversas ocasiones la manifestación verbal, llegando a producirse acciones violentas e intimidatorias, impiden el normal funcionamiento de la prestación sanitaria y coaccionan, en nombre de una libertad de expresión mal entendida, el ejercicio de un derecho reconocido a las mujeres por la Ley de SSR e IVE de 2010: el de interrumpir o no su gestación.
Desde los centros afectados denuncian que la impunidad con las que actúan estos grupos les anima a intensificar sus actuaciones, aumentando su frecuencia e intensidad y llevando las presiones más allá de las puertas de las clínicas".
Además aseguran que el "acoso" llega hasta los trabajadores. "Tal fue el caso de una de las trabajadoras de la Clínica Iris que fue amedrentada en las dependencias de una superficie comercial y en presencia de su hija. Hechos que han sido denunciados", aseguran.
Por todos estos motivos, la Asociación de Centros ha recordado al Subdelegado del Gobierno una batería de medidas que deberían ser aplicadas por los responsables de orden público, con el objetivo de que estas acciones cesen y no constituyan una amenaza para trabajadores y mujeres usuarias de los centros acreditados de IVE, entra las que destacan que la Subdelegación del Gobierno atienda y entiendan las necesidades de especial protección de las clínicas de IVE como un grave problema de orden público.
Además, le han solicitado al nuevo subdelegado que se den instrucciones a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado para que atiendan las llamadas de auxilio de las clínicas, con independencia de que las reuniones en las puertas de las mismas no sobrepasen el número de veinte personas. Que hagan acto de presencia los agentes policiales cuando sean requeridos por las clínicas, identificando a los integrantes de los grupos que protestan y mantengan su presencia en las inmediaciones. "La sola presencia de los agentes policiales, ayudará a la disolución de la reunión y, desde luego, impedirá el ejercicio de actos coactivos e intimidatorios para las pacientes".
Respuesta del Subdelegado
Antes estas propuestas, el Subdelegado del Gobierno ha informado a los centros que sus actuaciones se ven limitadas por el estrecho margen de maniobra que le permite la Ley, pero se ha mostrado receptivo a las propuestas presentadas, comprometiéndose a intentar frenar las acciones de estos grupos.