Hacemos un recorrido por los platos típicos de Feria: ¿llegarán a la hostelería de los barrios en septiembre?

Este año la gastronomía no llegará al Recinto Ferial. Aun así, el Ayuntamiento de Albacete ha anunciado que se potenciará la hostelería en los barrios. ¿Querrá decir eso que disfrutaremos de la comida típica de la Feria en los bares y restaurante de la ciudad?

Nos ponemos nostálgicos, y hacemos un repaso, consultando a los lectores de Albacetecapital.com, por los productos o platos típicos que encontramos a lo largo de los años en la Feria de Albacete.

Desde hace mucho, para empezar el mediodía ya en el recinto es tradicional comenzar el aperitivo con unas gambas y una caña. Aunque ya ha pasado mucho tiempo desde el cierre de esa cadena de supermercados, las gambas “del Seyca” eran toda una institución.

También las berenjenas de Almagro, aunque pertenecen a la provincia de Ciudad Real, tienen relevancia entre los encurtidos que se consumen durante estas fiestas.

Al llegar la hora de la comida hay diferentes opciones, seguir con el “picoteo”, pedir un bocadillo de “chorimorci” (un término acuñado hace unos años), uno de “salchicha blanca” con morcilla (por algunos conocido como blanco y negro) o uno de guarra, guarreta o guarrilla, como se conoce aquí la butifarra manchega, sin olvidar el típico bocadillo de jamón.

Si tu cita era una comida en las carpas, redondeles, o establecimientos cercanos a la Feria, los platos más comunes eran el “Estofao” de rabo de toro, tradicionalmente hecho con carne de lidia, unos gazpachos manchegos, pollo con cava, y para refrescar un poco de moje manchego (conocido así por lo bueno que está "mojar" con pan la salsa que deja la mezcla del atún, tomate, cebolla y aceitunas negras con un buen aceite de oliva y sal).

Después de comer, lo tradicional era un café, Miguelitos de La Roda y sidra, y para los más golosos un vasito de chocolate caliente.

Y si no eres de mojitos y preferías seguir el día en el paseo de la Feria, no puedes olvidar el vino dulce con canutillo, y para rematar la faena y antes de irse a casa a dormir, una “Hamburguesa Uranga”, seguro que muchos recuerdan todavía la canción.