
Pilar Segovia. FOTO: CCOO Albacete.
La situación de precariedad que existe en el sector de restauración moderna o comidas rápidas empieza por el contrato. La mayoría son temporales, a tiempo parcial y de no más de media jornada. A esto le se le suman unas condiciones de trabajo que no dejan margen a la conciliación de la vida laboral y familiara, ni planificar el futuro o las libranzas y las vacaciones.
Así vive Pilar Segovia, trabajadora en una de estas empresas de comida rápida. Ella ha dado su testimonio, en primera persona, en el que describe la precariedad laboral desde su propia experiencia. En este caso como trabajadora de un establecimiento de comida rápida. "Tenemos jornadas laborales anuales con una distribución irregular de los turnos de trabajo. En algunos casos no hay una referencia de horarios no ya anual, sino tampoco mensual, ni semanal, ni siquiera diaria, lo que hace que haya que estar disponible 'full time' para la empresa, e ir a trabajar unas horas al día, porque en estos sectores se trabaja por horas". Conciliar o simplemente planificar el tiempo libre es casi imposible "porque cada semana no se sabe cuándo habrá que trabajar o se podrá descansar".
Conocer su horario de trabajo con antelación es lo que más reclaman los trabajadores que como ella quieren poder planificar unas vacaciones. La organización de turnos es una de las tareas que deben mejorar en las empresas y en los convenios y hacer que se cumpla.
A esto se suma las condiciones en el día a día del trabajo. "Trabajo bajo presión. Como la empresa es de comida rápida, la forma de trabajar también es rápida, urgente, sin pausas, y los trabajadores trabajan con presión para que al cliente le llegue todo lo antes posible. Cada vez hay más competencia en servir la comida a domicilio, lanzando ofertas agresivas y puntuales que hacen que se trabaje con más presión en determinadas franjas horarias para que se cumplan los objetivos de venta", relata.
En el mejor de los casos, se puede optar a un incentivo variable en la nómina, si la empresa lo tiene establecido -que no en todas lo hay, porque según las empresas “ya te pagan por ir a trabajar”.
Lo que Pilar describe lo viven trabajadores jóvenes y estudiantes que tienen ese tipo de trabajo para sacarse un dinero mientras están estudiando. Pero no todos los casos son así, "incluso ellos tienen familia, recibos que pagar y junto con el resto de compañeros de trabajo, con contratos a tiempo completo, necesitan de otro trabajo a tiempo parcial para llegar a final de mes".
Al trabajar por horas y sin una concreción horaria "no sabemos cuál va a ser nuestro salario a final de mes. En algunas empresas no hay un registro semanal de las horas ordinarias, complementarias, nocturnas, extras, festivas… para que luego se refleje en las nóminas. Los trabajadores tienen que reclamar y exigir a las empresas todos los conceptos económicos que deben aparecer en su nómina, porque los han trabajado y no son gratis".
20.00 trabajadores con contratos precarios en Albacete
Pilar es una trabajadora en precario. Su caso no es excepcional. Sólo en la provincia de Albacete hay 20.000 personas con trabajos precarios, con contratos temporales y a tiempo parcial, con salarios muy bajos, jornadas arbitrarias y derechos laborales bajo mínimos. Lo denuncia el sindicato Comisiones Obreras que quiere combatir esta situación con la campaña “Precarity war”, cuyo objetivo es visualizar, denunciar y atajar la precariedad laboral y el trabajo sin derechos en profesiones como camareras de pisos, cajera/o, becario/a, monitora de comedor, comercial, teleoperadora, repartidores…
A día de hoy se hacen contratos laborales de apenas un par de horas al día, con salarios miserables y, muchas veces por debajo del convenio sectorial de referencia. Un ejemplo se vive en la hostelería o el comercio, sectores donde el 20% de los contratos firmados son de menos de una semana.
“Queremos que se empoderen y se unan a CCOO para librar la batalla”, dicen desde el sindicato que anima “a todas y todos los albaceteños que trabajan en precario a entrar en la web www.precaritywar.es, a contarnos de forma anónima y confidencial su historia personal y a unirse a Precarity war, la guerra contra la precariedad”.