El Gobierno central quiere transformar los activos tóxicos en vivienda con alquiler asequible mediante la Sareb, el conocido como ‘banco malo’. Esta Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria aglutinó todo el ladrillo improductivo de las entidades rescatadas en uno de los movimientos más criticados de la gestión del descalabro del sistema financiero español.
Diez años después, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha ubicado a la Sareb como una posible solución al problema del alquiler en España con una propuesta para ampliar el parque de vivienda pública.
Este es el mapa, municipio a municipio, de la distribución de los inmuebles de Sareb, según desglosa esta sociedad en su web. En total, son cerca de 50.000 viviendas. Una parte sustancial de ellas está en Catalunya, casi 13.500; por delante de las cerca de 8.900 en Comunitat Valenciana; 4.500, en Andalucía; 3.700, en Castilla-La Mancha y 3.500 inmuebles, en Murcia.
Fuente:
SAREB
Sin embargo, según el plan destallado por la vicepresidenta Nadia Calviño, en Castilla-La Mancha únicamente se van a movilizar para este fin un total de 1.534 viviendas, menos de la mitad de todas las disponibles. "La casuística de estas viviendas y su estado es muy variada y requiere detectar situaciones de vulnerabilidad y proporcionar a esas familias el apoyo necesario", ha indicado.
En Castilla-La Mancha, el mayor número de viviendas del 'banco malo' se concentra principalmente en las zonas limítrofes con la Comunidad de Madrid, es decir, las provincias de Toledo y Guadalajara, donde se llevaron a cabo decenas de promociones que se vinieron a bajo con la crisis inmobiliaria.
En Toledo, los municipios donde más se concentran viviendas del 'banco malo' son Recas (144 viviendas), Illescas (142), Casarrubios del Monte (109), Ocaña (133), Bargas (107) y Gerindote (103). La capital toledana tiene 50 viviendas de la Sareb mientras que Talavera de la Reina cuenta con 129.
En el caso de la provincia de Guadalajara, la mayoría se concentran en el Corredor del Henares. Es el caso de Azuqueca de Henares (88 viviendas), Alovera (70) o Guadalajara capital (53); y más alejadas destacan Trijueque, con 58 inmuebles, o Humanes, con 37. En el resto de provincias, las viviendas del 'banco malo' se reducen considerablemente, aunque hay casos destacados: Ciudad Real capital tiene 131 viviendas, en Cuenca prácticamente no hay, mientras que en Albacete, La Roda es el municipio con más inmueble (32) y en la capital albaceteña tan solo hay ocho.
Zonas "tensionadas"
El Gobierno de García-Page ya ha puesto el foco en varias ocasiones en las zonas "tensionadas" que son limítrofes con la Comunidad de Madrid. Una de las medidas más destacadas es que el Ejecutivo autonómico va a cooperar con el sector privado para la construcción de 10.000 viviendas a precio asequible, especialmente en estas zonas tensionadas de Castilla-La Mancha. Lo ha llamado el ‘Plan 10.000’ y se llevará a cabo en las capitales de provincia y los corredores del Henares, en la provincia de Guadalajara, y de la Sagra, en Toledo, limítrofes con Madrid. Esta planificación se ha presentado en Guadalajara y en Seseña (uno de los municipios toledanos más pegados a Madrid). Son viviendas para “comprar o alquilar”, dijo el presidente, a precios más asequibles.
Precisamente, Unidas Podemos ha presentado una medida “urgente” en Castilla-La Mancha para “garantizar” un alquiler a partir de 50 euros para familias y personas jóvenes de la región. El candidato a la Presidencia de la Junta, José Luis García Gascón, ha manifestado que “queremos que la gente joven pueda independizarse y quedarse en su tierra sin que tenga que destinar la mitad o más de sus recursos para vivienda”. La coalición afirma que esta medida llegaría a unas 581.000 personas, de entre 15 y 39 años y al 45% de los hogares de Castilla-La Mancha.