Efectivos del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Albacete han investigado a una persona, residente en la provincia de Albacete, de 62 años de edad, como presunto autor de un delito de homicidio por imprudencia grave y un delito contra la seguridad vial por conducción temeraria, dando positivo en cocaína, tras una prueba terapéutica realizada en el centro hospitalario donde fue trasladado tras el accidente.
La Guardia Civil de Tráfico albaceteña intervino en un siniestro vial ocurrido en la carretera CM-3218 (intersección CM-332 Albacete a intersección N-322 Casas Ibáñez) en el que se vieron implicados dos vehículos, tras una colisión frontal.
Como resultado del siniestro, el conductor del furgón resultó herido de carácter grave, siendo atendido de las lesiones sufridas en el Hospital General Universitario de Albacete. Por otra parte, el conductor del otro vehículo todoterreno accidentado fue atendido en el mismo centro hospitalario, falleciendo horas después.
Una vez recuperado de sus heridas, el conductor causante del siniestro vial y, tras una exhaustiva investigación policial realizada por efectivos del Equipo de Atestados e Informes del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Albacete, para determinar las circunstancias que concurrieron en el reseñado siniestro vial, procediendo a la instrucción de las pertinentes diligencias.
La Guardia Civil puso a disposición judicial al conductor del furgón, que resultó investigado como presunto autor de un delito de homicidio imprudente al efectuar un adelantamiento antirreglamentario en la vía por la que circulaba, no cerciorándose que venían vehículos por el carril contrario lo que dio lugar al choque frontal con el vehículo en el que viajaba el fallecido, siendo además investigado por otro delito contra la seguridad vial, por conducción temeraria.
Destacar que el herido, dio positivo en drogas, concretamente en cocaína, tras la realización de una prueba terapéutica realizada en el centro hospitalario donde fue derivado en ambulancia tras el accidente.
Los hechos relatados podrían estar castigados, para el delito de homicidio por imprudencia grave, con la pena de prisión de uno a cuatro años, además de la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores de uno a seis años.
En cuanto al delito contra la seguridad vial, por conducir el vehículo con temeridad manifiesta, podría ser castigado con la pena de prisión de seis meses a dos años y privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta seis años.
Como consecuencia de positivo en cocaína, se le extendió un boletín de denuncia al Reglamento General de Circulación por una infracción muy grave, llevando aparejada una pena de 6 puntos y una sanción económica de 1.000 euros.