Pilar Villalba Sevilla es Psicóloga, Psicoterapeuta, ex presidenta de la Asociación A.I.P.A (Asociación Independiente de Profesionales de Albacete), entidad impulsora, promotora de la puesta en marcha del Centro Asesor y Casa de Acogida de Albacete, y ex coordinadora de esta red provincial, entre julio 1989 a 1993. Ella formaba parte de ese grupo de personas que consiguieron que ambos recursos iniciaran su andadura en Albacete. Villalba es testigo de la violencia contra las mujeres, desde la perspectiva de quien las ayuda a salir de su situación.
“Recuerdo con una gran emoción a las mujeres que asistieron por primera vez al Centro Asesor y la Casa de Acogida. Yo siempre rindo homenaje a esas mujeres por el coraje y las lecciones que nos daban cuando llegaban allí”. Son recuerdos que a Villalba hoy se le agolpaban con motivo del Día Internacional Contra la Violencia de Género y que dicen son “un testimonio vital inestimable para mi”.
Lo cierto es que la labor que tanto ella como AIPA llevaron a cabo impulsado la creación de sendos recursos supuso un hito para esas mujeres maltratadas que hasta entonces no tenían donde acudir para poder huir de sus verdugos. “Ellas son el motor de este proyecto”.
El primer caso
Todos los casos de violencia machista, todas las mujeres que acudieron pidiendo ayuda, todas las víctimas son importantes pero la primera no se olvida nunca. “Yo recuerdo que la primera mujer que vino a la casa de acogida fuimos a buscarla con dos coches a un pueblo de la sierra con sus dos hijos. Esta mujer cada vez que la veo, porque me la encuentro, nos emocionamos las dos”. Éste fue sólo el primero de muchos casos con el que tuvieron que lidiar y se encontraban, asegura Villalba, con unas mujeres que estaban “tan destrozadas tenían un aspecto que no sabíamos si podríamos ayudarlas, si íbamos a poder salir adelante”. Pero con la ayuda que recibían tanto en el Centro Asesor como en la Casa de Acogida en unas pocas semanas mejoraban. “Era asombroso como un mes después de estar en el centro asesor y en la casa de acogida te encontrabas con mujeres que parecían otras. Yo eso lo tengo gravado como algo que no se me va a olvidar”.
Años de involución
Pero todo lo que se había conseguido poniendo recursos e invirtiendo para prevenir y ayudar a las víctimas desapareció a cuenta de la manida crisis económica y fue pasto de los recortes. Algo que no le ha pasado inadvertido a Pilar Villalba que asegura vivir”con tristeza y preocupación la involución que se han vivido en estos últimos años por las políticas de igualdad y las de atención a la violencia contra la mujer”. Y es que en la lucha y prevención de la violencia machista intervienen muchos factores y se requiere un trabajo coordinado de muchos años, desde muchas áreas de educación, psicológica, servicios sociales, derecho.. “y de pronto ha habido un parón que vamos a pagar muy caro”.
De hecho insiste en lo alarmante que es el aumento de jóvenes y adolescentes que están involucrados tanto como víctimas como agresores en casos de violencia de género porque demuestra que “tenemos sensación de estar en una igualdad real pero es falso”.