En Albacete se diagnostican de media un nuevo caso de VIH al mes. Son datos ofrecidos por el doctor José Javier Blanch. Son datos sólo de la capital, sin contar con los Hospitales de Almansa y Villarrobledo.
A día de hoy en en la consulta atienden a 330 pacientes en total, a los que se suman los nuevos diagnósticos, 21 en los dos últimos años. Una elevada cifra si se tiene en cuenta que se conocen de sobra los métodos para evitar el contagio del Virus de Inmunodeficiencia Adquirida, VIH. Suelen ser "fundamentalmente varones". De hecho de estos 21 nuevo diagnosticados a lo largo de estos dos últimos años, se contabilizan 14 personas que se han contagiado por vía sexual en relaciones homosexual y bisexuales, y 5 contagios en relaciones heterosexuales.
Sorprende también la edad de las personas que son diagnosticadas ya que están entre los 21 y 45 años. Más aún teniendo en cuenta que desde el contagio o infección hasta el diagnóstico suelen pasar de media unos 10 años.
Se ha perdido el miedo al VIH
El cambio de nuevos diagnosticados de VIH es notable. "Hace unos 15-20 años el perfil de paciente con VIH era el de persona que consumía drogas por vía parenteral, es decir, inyectada. En los últimos años no tenemos pacientes contagiados vía parenteral y ha cambiado el perfil ya que el contagio se hace por vía sexual.", añade el doctor Blanch.
Pero ¿qué ha pasado para que la gente no tome precauciones ante el contagio en las relaciones sexuales? La respuesta, según el doctor Blanch, es que "se ha perdido el miedo al VIH. Hasta hace unos años se le tenía miedo porque era una enfermedad mortal pero ahora todo el mundo sabe que es una infección que se controla”.
Tratamientos
Los pacientes diagnosticados de VIH pueden hacer una vida completamente normal, siempre cuando sigan un tratamiento farmacológico que nada tiene que ver con el de años atrás. Hoy, los tratamientos antirretrovirales son fármacos que han evolucionado muchísimo a lo largo de estos últimos años. “Hace unos años se tenían que tomar hasta 10 pastillas diarias. Hoy con una basta. De hecho se lleva una vida normal, como quien padece una afección crónica", explica el doctor.