El gobierno de Castilla-La Mancha tiene la potestad de convocar la habilitación que permite ejercer la actividad de guía turístico en Castilla-La Mancha, puesto que en Albacete ahora sólo una persona tiene esa acreditación. Ahora Ganemos Albacete quiere que el sea el Ayuntamiento de Albacete, por mandato del pleno, exija a la Junta que convoque esta habilitación y que, además, vuelva a asumir el mantenimiento de la oficina de información turística, que ahora le cuesta al Ayuntamiento 30.000 euros al año.
Así se expone en la moción que GAnemos llevará al Pleno de este jueves y que se ha presentado este lunes. Además, el viceportavoz de Ganemos, Álvaro Peñarrubia, ha recordado que Copedal cerró en 2012 todas las oficinas de turismo de la región, decisión que, además de los 40 despidos, también tuvo respuesta dentro de su propio gobierno al presentar la dimisión el director general de turismo. La alternativa que propuso la consejera entonces fue ir de la mano del sector privado.
Ante ese panorama, después de meses sin oficina de información, el Ayuntamiento de Albacete, firmó un convenio con la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería y Turismo para la gestión indirecta del recurso. “Ahora, con el convenio caducado, nos enteramos en la presentación del Plan de Competitividad que la gestión de la oficina de información turística va a salir a licitación, algo con lo que este grupo discrepa absolutamente ya que una cosa es prestar el servicio ‘de la mano’ o en colaboración con el sector privado, y otra diferente es que lo gestione el sector privado con dinero público y se llama privatización de los servicios públicos”, ha indicado Peñarrubia.
Respecto al tema de los guías turísticos, dice Peñarrubica, que les consta que hay personas que han manifestado su voluntad de convertirse en guías autorizadas, tanto para informar a visitantes foráneos como a personas de Albacete que quieran conocer la ciudad.
El problema reside en que la última convocatoria para la obtención de la habilitación que permite ejercer la actividad de guía turístico se remonta a 2008, a pesar de que el Decreto 96/2006 de Ordenación Profesiones Turísticas de Castilla-La Mancha obliga a la Consejería competente en materia de turismo a convocar, al menos cada dos años, dichas pruebas.
Sin embargo, ni con el gobierno de Cospedal ni con el de García-Page la Junta ha llegado a convocar las pruebas. “Y no sólo eso -ha añadido Peñarrubia- sino que tenemos constancia de que el actual presidente y alguno de sus cargos han llegado a aconsejar por escrito a personas que han solicitado acceder a la acreditación que lo haga en cualquier otro punto del territorio español, ya que conforme a la nueva legislación, podría ejercer también en Castilla-La Mancha. Una solución que nos parece a todas luces inadmisible”.