©Juan Ramón Moscad. Economista
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(Lo que sigue a continuación es la transcripción de la primera parte de la entrevista a Emilio Duró realizada por el Loco de la Colina el 4 septiembre de 2012)
LC: Buenas noches. He venido a descubrir si merece la pena seguir hablando de otra manera, de otra manera de vivir, de vivir la vida más profunda, más plena, más auténtica. Si tiene sentido seguir insistiendo en la necesidad de ser dignos, honrados , consecuentes, o si definitivamente debo arrojar la toalla y aceptar que ni el mundo ni el hombre tienen arreglo y que es mejor callarse y dejar que se estrellen a su gusto. La respuesta la tienes tú. De ti depende en que siga insistiendo o que me calle para siempre. Para siempre. Voy a darle las gracias a este hombre, gracias a una conferencia que grabaron sin su permiso y que colgaron en youtube, con un extraordinario éxito, se ha convertido en el nuevo gurú del optimismo y la ilusión laboral en tiempos de crisis. Tiene una vitalidad desbordante. Aunque estudió ciencias económicas y es prestigioso consultor además de haber ejercido de directivo en importantes empresas, su tema favorito es la felicidad y como conseguirla. Es catalán de Lleida y se llama Emilio Duró. Pero ¿no es fácil deprimirse con la que está cayendo, Emilio?
ED: ¿Pero qué está cayendo?
LC: Las crisis de todo tipo: las económicas y las morales.
ED: Vamos a ir por partes. Mira Jesús, tú no eres así. O sea, tu padre no sé si vive, el mío tampoco. ¿Tú te imaginas que le dejaran estar una con lo que tú tienes? Sería el hombre más feliz del mundo. A mi abuela la llevo a invitar a un hotel de 5 estrellas con buffet libre, se va a las 5 de la mañana y se levanta a las 12 y media. Mi hermano me acompañó el otro día, que él es de pueblo como yo, a un hotel de lujo que me invitaron. Bajó a desayunar a las siete y se marchó a las 11 y media. Y no se lo creía. Ya está bien. No está cayendo. Los niños tienen más que nunca, hay más oportunidades que nunca, la gente dice que los niños tienen menos, pero no tienen menos oportunidades,tienen más. Tienes hijas. Probablemente han viajado más que tu lo hubieras hecho a su edad. Seguramente tienen más acceso a las nuevas tecnologías, información y cultura que tú hubieras tenido jamás.
LC: ¿Pero no le cuesta hablarle a un parado de larga duración de optimismo?
ED: El otro me dijeron algo tremendo que es “que la pena no educa”. Es cierto. Partiendo de esto, no les podemos quitar la poca ilusión que tienen, al parado de larga duración. 1º) Lo que tenemos que hacer es ayudarle a creer en él, cambiarle su parte física. Yo te aseguro que si nos preocupamos de él durante una semana, un mes deporte 5 días a la semana, arreglaremos su parte anímica, su crisis y su pasión. 2º: Tenemos que buscar sus bases emocionales. Nadie fracasa en la vida por golpes técnicos. Fracasamos por golpes emocionales. Yo siempre lo he dicho: tu pierdes un trabajo, pero tienes una pareja que te quiere, una familia que te quiere, unos hijos que te quieren, te has cuidado físicamente, y sacas fuerzas contra de la adversidad. Se te junta una separación con una pérdida de trabajo y como sales? Se te junta una enfermedad de tu hijo. Luego lo que nos destroza la vida son golpes emocionales. Y esto es un cambio total Jesús, que cuando quieras lo hablamos. Por ejemplo: antes, nuestros padres morían jóvenes. Nuestros padres tenían la ilusión de trabajar en Londres. ¿Tu te imaginas que trabajas en Londres, tu madre tiene alzheimer y le quedan 25 años de vida y no las ves? ¿Se puedes ser feliz? Luego tenemos que cambiar la sociedad. Esto está cambiando y esto va así.
LC: ¿Que ilusión, qué optimismo puede tener una persona que el banco le acaba de echar de su casa?
ED: Jesús, la principal causa de infelicidad en la vida es el miedo; y estas cosas se tienen que tomar con mucho cariño y con mucha calma. No hay recetas fáciles. Si yo tuviera 51 años, que no estoy en el mejor momento (estamos acostumbrados a sufrir por el pasado y el futuro y a dejar de vivir el presente), 2 hijos, me sacan de mi casa y estuviera en el paro, estaría asustado, aterrado. Los entiendo perfectamente. Y ahora vamos a construir el futuro, porque el pasado no se puede cambiar. En psquiatría se ven 2 tipos de personas: los que tienen un foco de control interno (Se preguntan qué puedo hacer) y los que tienen un foco de control externo (dicen quién ha sido). Esta persona que acaba de perder la casa se tiene que preguntar ¿qué puedo hacer a partir de ahora? Y el 99,99% de la población no tiene tu casa y vive. Luego épica fuera de tu casa. Entonces, ¿hacemos esto o le decimos pobrecito, que lástima me das y que se muera?
LC: ¿Y la ilusión de los jóvenes, qué podemos decirles a los jóvenes que tienen 2 carreras y que no tienen trabajo?
ED: Le cambio el mañana. Le doy todo lo que tengo, sin carreras y ser joven. Decía un médico muy bueno “Emilio, tienes que valorar la vida, porque cuando tu padre tenía una eyaculación con 150 millones de espermas, tu eres el que ganó. Imagínate el resto”. Partiendo de esto, por favor, ¿como la juventud va a ser un problema? Si con 25 años has perdido la ilusión, te quedan 85 años de vida. Lo que es duro es que nosotros nos levantemos con pasión, ilusión y alegría. Lo que es duro es que la 1ª entrevista es fácil y le pones pasión, la 873 seguir haciéndola con ilusión ya es más difícil. Enamorarte de tu mujer es muy fácil, mantenerla es más difícil, sólo la mantendrás si te mira, y sólo puedes admirar a una persona con valores, con ilusión, con pasión y con alegría. Tenemos que cambiar el lenguaje. Perdóname que me extienda. Yo trabajo en empresas o en colegios. A quién hacemos caso: al amargado, al que se queja, al que está quemado. A los 999 restantes no les hacemos caso, y son buena gente y no dan problemas. Pues ya está bien. Hagamos caso al amable, cariñoso y no hay prepotente amargándote la vida.
(Continuará…)