IU Ganemos negocia ya con las vistas puestas al presupuesto del 2017 que, sin un Plan de Estabilidad Presupuestaria, podrá hacer posible el cumplimiento del acuerdo de investidura.
Con el borrador de los Presupuestos de la Diputación ya en las manos del resto de Grupos Políticos el presidente de la Institución Provincial ha asegura que el pleno para debatirlos podría fecharse antes de Semana Santa.
Desde este miércoles, 9 de marzo, los Grupos Políticos representados en la Diputación Provincial de Albacete ya tienen en sus manos los presupuestos de la Institución para el 2016. Unos presupuestos que, tal y como ha asegurado el presidente, Santiago Cabañero, vienen lastrados por el último plan de ajuste aprobado apenas unas semanas antes de las elecciones municipales por el anterior ejecutivo provincial presidido por Francisco Núñez.
Y es que tras sobrepasar el gasto con la compra del Palacio Fontecha, el anterior Equipo de Gobierno de la Diputación aprobó un Plan de Estabilidad que impide que ahora se pueda utilizar un remanente de tesorería que se prevé que haya para este año. "El borrador contempla 91 millones de euros - anunciaba Santiago Cabañero- de los que solo podremos gastar 79 millones de euros". Estas cifras junto con el remanente previsto y que ascendería a los 9 millones de euros "que no podremos utilizar hasta el 31 de diciembre de 2016, estamos hablando que un montante de 20 millones de euros que no vamos a poder llevar a las inversiones que son necesarias ahora en la provincia", se lamentaba Cabañero.
Precisamente este Plan de Estabilidad hace que algunos de los acuerdos de investidura firmado con IU Ganemos, y que deberían verse reflejados en este primer presupuesto de la Corporación actual, no puedan cumplirse. En IU Ganemos son conscientes de ello, de hecho han asegurado en una rueda de prensa: "el margen de maniobra es poco por lo que nos hemos planteado una línea de medidas políticas para este año y dejar ya algo trabajado para el 2017". Eso sí, con la condición que de ese presupuesto, el del 2017, quede aprobado en el mes de noviembre para que el primer día del año se trabaje con esas cuentas.
A sabiendas de que poco se puede hacer para mejorar unos presupuestos "muy limitados" este grupo político se centra ahora en iniciar conversaciones y propuestas que se incluyan en los presupuestos del año que viene. Aunque a día de hoy siguen reivindicando como urgente el desarrollo políticas de apoyo a los municipios y que parece que con el Plan de Ajuste se vienen abajo.
Aún así aseguran que la Diputación "mantiene determinados servicios o instituciones que no son competencias propias pero que tradicionalmente se vienen gestionando desde aquí y que supone un gasto también importante", para ello pretenden que a lo largo de la legislatura esos gastos que corresponden a servicio que no son competencia de la Diputación vuelvan a los organismos que corresponden para poder disponer de ese dinero que ahora consumen en ayudar a los pequeños municipios.
El sentido de su voto en el Pleno donde se debatan estos presupuestos será consensuado. Es decir, "se consultará con sus asambleas de todos aquellos pueblos donde hay concejales y concejalas y haremos una reunión de concejales".