Este nuevo curso escolar la Asociación Desarrollo estrena instalaciones. Lo hace en lo que fue, en su día, la Escuela-Hogar que se ubicaba en el Centro Escolar Ana Soto de la capital. Ahra y tras la cesión de este espacio, dos plantas y media, los niños y jóvenes con Trastorno del Espectro Autista, TEA, que son atendidos por la Asociación, realizarán parte de las actividades en horario de tarde, en el colegio.
"Los programas que se van a desarrollar aquí van a ser a la población con Trastorno del Espectro Autista en edad infantil y juvenil", explica Yolanda Monteagudo, gerente de Asociación Desarrollo. Esto supone un "alivio de espacio" porque cada vez son más las personas atendidas, y el número de trabajadores de la Asociación. Además, insiste la gerente, gracias a este nuevo espacio separan programas. "El centro de Día permanece así donde está, junto con la vivienda, mientras que las actividades de la tarde se trasladan al Ana Soto".
Muchas son las bondades de este cambio para Desarrollo, empezando porque supone un acto de generosidad del propio colegio, pero quizá lo más significativo es que el centro se va a convertir en un lugar de convivencia. Si bien es cierto que los niños y jóvenes que en él se atiendan no estarán junto al 100%, sí que por las tardes se cruzarán en los pasillos y zonas comunes. "Es una manera de estar incluídos en la comunidad educativa en general", añade Monteagudo.
Serán alrededor de 120 usuarios con edades comprendidas entre los 2 años, en el caso de infantil, hasta los 21, que es la edad donde finalizan los programas juveniles. Las aulas y salas han sido acondicionadas para los programas de intervención terapeutica (terapia ocupacional, psicología...), también contará con aulas TIC y parte del programa de deportes también se desarrollará aquí.