“Las vacunas y la inmunidad han sido el arma letal contra el virus”, recalcó el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz. Por eso, Castilla-La Mancha se ha posicionado en favor de una cuarta dosis contra la enfermedad entre las personas mayores de 80 años, porque así la enfermedad se desarrolla de manera “mucho menos grave”, al igual que la letalidad de la enfermedad. Por eso, el responsable de Sanidad ha pedido que llegue “cuando antes” al Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud. Los últimos datos del Ministerio de Sanidad señalaban una incidencia altísima en el caso de los mayores de 80 años en la región, de más de 1.300 casos por cada 100.000 habitantes.
De este modo, Fernández Sanz ha señalado que cada comunidad puede decidir cuándo iniciar esta nueva vacunación a la población de más riesgo. Emiliano García-Page se ha pronunciado en el mismo sentido. “Vamos a propiciar que pongamos la cuarta dosis a los mayores de 80 años”, aseguró en Talavera de la Reina. “Lo vamos a asumir como nos ha pasado en otras ocasiones, por la simple razón de que España ha dado un salto dejando atrás el miedo a la pandemia, aunque no la prudencia, y los mayores de 80 años son los que tienen más vulnerabilidad”, resaltó el presidente de la región.
El consejero de Sanidad recordaba que se tiene que evitar estornudar al aire, y hacerlo en un pañuelo o en el codo, evitar tocarse también la cara, especialmente si hay sintomatología y mantener la higiene de manos, la limpieza y la ventilación de los espacios. También ha recordado que, dentro de lo posible, es deben llevar a cabo las actividades al aire libre. Si hay COVID-19, mantener (o no) el aislamiento, según estipula la legislación vigente.
En cuanto a la situación actual de la COVID-19 en la región, Fernández Sanz señaló que la incidencia en Castilla-La Mancha está “un poquito por encima” de la media nacional, aunque la diferencia es de más unos 150 puntos: 962, frente a los 813 de España en el caso de los mayores de 60 años. “España ha superado los 12 millones de casos de contagio, en Castilla-La Mancha son apenas 510.000 casos, un 4,25 por ciento del total”, resaltó. Además, insistió en que esta está bajando, porque los datos van mejorando. “Esto nos hace pensar que lo que pudo ser un reflejo de la Semana Santa va bajando”, afirmó.
Actualmente la tasa de ingreso de personas con COVID-19 en las UCI de la región es de 0,49 por cada 100.000 habitantes, con once personas con respirador. “Las vacunas han sido el arma letal contra el virus”.