El Gobierno de Castilla-La Mancha destinará un total de cuatro millones de euros en ayudas a las empresas y entidades de formación que además de formar a trabajadores desempleados, se comprometan a su contratación. La dotación para esta línea de ayudas pasa así de los 300.000 euros de 2015 a los cuatro millones de euros presupuestados para 2016.
Así lo ha anunciado hoy el portavoz del Gobierno regional, Nacho Hernando, que ha explicado que el Consejo de Gobierno dio luz verde ayer a esta convocatoria de subvenciones a la que “damos un protagonismo especial” y que complementa “la importante labor que en la lucha contra el desempleo estamos llevando a cabo en la presente legislatura”.
Hernando ha detallado que en las tres convocatorias anteriores la escasez de la cuantía hizo que el número de trabajadores desempleados que se benefició de estas ayudas fuera muy reducido, siendo apenas de 106 en 2015. El incremento de la partida para este año, muy superior a la del ejercicio de 2015, permitirá llegar a cerca de 1.500 desempleados a través de 98 cursos.
Otra de las novedades es que, por primera vez, se publica de forma específica una convocatoria con el compromiso de contratación, ya que en años anteriores este tipo de ayudas estaban integradas en otra convocatoria general.
En la concesión de las subvenciones se valorará la cantidad y la calidad del empleo creado, priorizando la contratación indefinida frente a la temporal y la jornada completa frente a la parcial, “conscientes de la necesidad de terminar con el empleo precario”, ha aseverado el portavoz.
Las ayudas van destinadas a la contratación de desempleados, siendo los colectivos prioritarios los parados de larga duración, personas con necesidades formativas especiales, jóvenes que hayan abandonado de forma temprana el sistema educativo, víctimas de violencia de género y personas en riesgo de exclusión social.
El 75 por ciento del presupuesto se destinará a subvencionar las acciones formativas con un compromiso de contratación no inferior al 60 por ciento del alumnado que finalice las mismas, mientras que el 25 por ciento restante se dedicará a acciones formativas con un compromiso de inserción de, al menos, el 30 por ciento de los alumnos.
También serán objeto de subvención las becas y ayudas de transporte, conciliación, manutención y alojamiento que se concedan a los desempleados que participen en las acciones formativas citadas anteriormente y, en su caso, la compensación económica a empresas por la realización de prácticas profesionales no laborales.
Las empresas o entidades de formación interesadas en ofertar alguno de estos cursos dispondrán de tres plazos de solicitud repartidos a lo largo del año. El primer plazo comenzará al día siguiente de la publicación de la de la convocatoria, extendiéndose durante 20 días hábiles, el segundo ocupará del 1 al 22 de julio, y el tercero y último se extenderá del 15 de octubre al 5 de noviembre.
El portavoz del Ejecutivo regional se ha mostrado convencido de que el incremento en la partida destinada a estas ayudas supondrá “un verdadero incentivo para nuestras empresas, que se traducirá en mejores cifras que las que hemos obtenido en la suma de los últimos cuatro años” y que reforzará los “excelentes resultados” que ya está arrojando el Plan Extraordinario por el Empleo, que ya ha permitido la contratación de 5.100 desempleados.