La Consejería de Sanidad de Castilla-La Mancha está “informando y formando” al personal de la Atención Primaria regional desde este martes sobre los protocolos que permitan un “mejor control y vigilancia” de los casos sospechosos de COVID-19 y sus contactos en la comunidad autónoma.
En el sistema de vigilancia estarán implicados directamente los facultativos de Atención Primaria que “pueden pedir directamente los test PCR desde sus sistemas y no será necesario que participen otros facultativos”, ha dicho Juan Camacho, director general de Salud Pública.
Sin embargo, el grueso del sistema estará compuesto por un total de 836 enfermeras en toda la región. Por un lado, 409 que trabajan en centros de salud con menos de 1.000 tarjetas sanitarias (no se han facilitado datos provinciales) que sumarán las funciones de vigilancia epidemiológica a sus tareas habituales.
Y por otro se contratará a 427 enfermeras y enfermeros de refuerzo para centros de salud con más de 1.000 tarjetas sanitarias. Se trata, ha dicho, de “enfermeras investigadoras” que se ocuparán de la notificación de casos, las encuestas epidemiológicas y el seguimiento de los casos sospechosos y sus contactos.
“Creemos que esa tarea de control y vigilancia puede ser realidad desde la Atención Primaria por una cuestión de su propia esencia y porque supone más accesibilidad del ciudadano a la Sanidad”, ha dicho el director general de Salud Pública, quien ha calificado de “lógico” que esta “nueva tarea” para Atención Primaria venga “acompañada de recursos”.
Por provincias, en Albacete se contratará a 86 enfermeras investigadoras, Ciudad Real tendrá 108, habrá 32 en Cuenca, 52 en Guadalajara y 149 en Toledo. Una distribución que, según Camacho, corresponden a una ratio según la población provincial.
Una plataforma web con datos de contagios por municipios
El director general de Salud Pública ha informado también de que ya se trabaja en una plataforma web para tener información “en tiempo real” sobre los contagios y que los datos por municipios estarán disponibles “en dos semanas”.
Camacho ha vuelto a apelar a la “responsabilidad” ciudadana después de que en el mes de abril se produjese en Castilla-La Mancha “una movilidad más allá de lo necesario entre comunidades autónomas”, en particular desde la vecina Comunidad de Madrid. Algo que, ha explicado, ha vuelto a detectarse a través de la demanda de tarjetas sanitarias.
La movilidad, ha dicho, se está justificando por causas laborales pero, aclaraba, “si se pide una tarjeta sanitaria es que hay algo más”.
Ya se han iniciado las notificaciones de casos sospechosos
Hoy el Boletín Oficial del Estado publica, a través de una orden ministerial, la obligatoriedad para las comunidades autónomas de notificar los casos con síntomas de COVID-19 detectados a través de test PCR y hacerlo en las 24 hora siguientes a su detección, con datos que incluyen tanto a los laboratorios públicos como a los privados.
Camacho ha confirmado que ayer ya se iniciaron notificaciones de casos. “Sí, ya se ha empezado. Ayer llegaron unos cuantos centenares desde Atención Primaria”.
Y es que una de las cuestiones que el Ministerio de Sanidad ha exigido a Castilla-La Mancha para que todas las provincias puedan pasar a fase 1 tienen que ver con mejorar su capacidad de vigilancia epidemiológica.
“Se nos trasladó que hay que tener disponibles todos los datos y capacidades de vigilancia”, decía Camacho y por eso ayer lunes se han seguido enviando datos al Ministerio de Sanidad, así como documentación con las estrategias de vigilancia, el plan formativo de las enfermeras investigadoras así como “un pequeño resumen” de la notificación que también estará disponible en la plataforma web que se ponga en marcha.
Castilla-La Mancha comprará un 35% más de vacunas de gripe
Por otro lado, ha anunciado que la región se ha adherido al acuerdo marco nacional para la compra de vacunas de cara a la campaña contra la gripe 2020-2021 que se espera para octubre o noviembre con una estrategia “armonizada” con el Ministerio de Sanidad y el resto de comunidades autónomas.
Este año habrá un 35% por ciento más de dosis respecto a la pasada campaña.